El amor y el miedo son las mayores fuerzas que nos mueven a los humanos. En cada momento de gran despliegue emocional esas sensaciones están presentes, es la medida de su intensidad la medida para sentirse vivo. No hay manera de saber si lo que somos es el sueño o la pesadilla de algo más, no hay manera de saber si existimos realmente; sin embargo la nitidez de las sensaciones de miedo y amor son innegables, van más allá del tiempo y ocupan todo el espacio.
Siempre es mejor simplificar el amor, siempre es mejor pensar en el amor como en el absoluto que todos han sentido y entienden. El amor como un sentimiento unico, puro, homogéneo: nada más falso. El miedo es la herramienta principal del poder, nada mejor que el miedo para generar inmovilidad y obediencia; si a ese miedo lo acompaña una percepción del amor como la idiotez de la pureza hemos creado el mundo de las tiranias.
Cuando el amor y el miedo se disputan la acción del sujeto, no hay manera de saber el resultado. Es ese el momento de ser coherente con el discurso del amor que cada uno mantenga, es en medio del conflicto que la complejidad de esos sentimientos nos lleva a una u otra acción. La historia demuestra que la mayoria de las veces gana el miedo.
domingo, 4 de noviembre de 2012
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2 comentarios:
Necesito de alguien, que me mire a los ojos
cuándo hablo.
Que escuche mis tristezas y desiertos con
paciencia y aún cuándo no comprenda, respete
mis sentimientos.
Necesito de alguien, que venga a luchar a mi lado
sin ser llamado.
Alguien lo suficientemente amigo, cómo para
decirme las verdades que no quiero oír, aún
sabiendo que puedo irritarme.
Por eso, en este mundo de indiferentes, necesito
de alguien que crea en esa cosa misteriosa,
desacreditada y casi imposible: ¡ LA AMISTAD !
Que se obstine en ser leal, simple y justo.
Que no se vaya, si algún día pierdo mi oro y no
pueda ser más la sensación de la fiesta.
Necesito de un amigo, que reciba con gratitud mi
auxilio, mi mano extendida, aún cuándo eso sea
muy poco para sus necesidades.
No pude elegir, a quienes me trajeron al mundo,
pero puedo elegir a mi amigo.
En ésta búsqueda, empeño mi propia alma, pues
con una amistad verdadera.
La vida se torna más simple, más rica y más bella.
Charles Chaplin
lindo, gracias por el comentario.
abrazo
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